Nací y llevo los 26 años de mi vida como residente de un lindo país llamado Colombia, muchas personas han escuchado hablar del país por ser el segundo más biodiverso del mundo o tal vez por tener uno de los cafés más reconocidos, sin embargo, la mayoría han escuchado de nosotros por problemas de desigualdad, corrupción y violencia.
Una de las consecuencias que tiene esta realidad es el mal servicio que se prestan en las entidades de salud, se pueden ver demoras en tratamientos de hasta 9 meses, se pueden ver negaciones en procedimientos que solo son materializados después de resolverse en tribunales a través de tutelas, pero uno de los peores y que a la mayoría de los ciudadanos han padecido, aunque no presenten enfermedades crónicas es las largas esperas en las salas de urgencias.
Se estima que la mayoría de las salas de urgencias del país muestran una espera promedio entre 6 a 9 horas cuando los casos no se clasifican dentro del triage en las etapas I y II, y hay varias razones por las cuales se da este fenómeno, procedimientos poco claros, falta de estudio sobre los patrones de llegada de las urgencias y falta de comunicación entre los hospitales de las zonas.
Pienso que con la tecnología llegaremos a mejorar cada uno de estos problemas de fondo, ¿Cuán distinto seria si se estudiaran los patrones de cada hospital y se designaran turnos del personal y recursos dependiendo de esos patrones?, ¿Cuánto más efectivo seria que el personal no debiera gastar tiempo valioso manejando las programaciones de los exámenes y la gestión de las salidas, sino que fueran procesos automáticos? ¿Cuan distinto no seria todo si como paciente, pudieses ver la ocupación de las distintas salas y tomar la decisión de ir a la menos congestionada? ¿Cuánto más cómodo seria para el paciente saber en cuanto tiempo será atendido y por quién?
Llevo un semestre estudiando una maestria en ciencias de la información y durante el desarrollo de este semestre me he dado cuenta como todas estas son posibilidades que gracias a la informática tenemos, gracias a herramientas como la inteligencia de negocios, el BPM y la inteligencia artificial, podríamos tener una atención de urgencias de calidad, donde los recursos estuvieran bien utilizados y un modelo de completa transparencia buscando la excelencia en el cuidado.
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